Al arribo de los efectivos se encontraron con un cabo de la Policía Provincial, Dante Loto, el cual fue acusado por su pareja de una agresión física.
Ante ello se iniciaron actuaciones constatando que el efectivo policial reviste funciones en Río Grande pero eventualmente se encontraba haciendo goce de su licencia, estando de vacaciones en la ciudad de Ushuaia.
Allí fue demorado y se iniciaron actuaciones por flagrancia por el delito de “lesiones”, ante lo cual se lo notificó de derechos y garantías para posteriormente recuperar su libertad. Administrativamente la jefatura de Policía resolvió su pase a situación de pasiva.