Cuando la edad no es impedimento para ejercer un derecho constitucional y brindar esperanzas de un país mejor.
Con 93 años, Maria Satz no quiso dejar pasar la oportunidad y acompañada de su hija se dirigio hasta el colegio Perito Moreno donde emitió su voto.
Un sufragio sin inconvenientes, y con fiscales a disposición quienes le acercaron la urna hasta su vehiculo, Maria pudo emitir su voto.
Un ejemplo de vida que nos da la esperanza de un país que empuje siempre en conjunto para prosperar.