Así quedó establecido con la Circular 19/23 de Anses, que fijó los criterios operativos para garantizar este derecho contemplado en la Ley 27.675 de Respuesta Integral para personas con VIH, hepatitis virales y otras infecciones de transmisión sexual y tuberculosis, sancionada en junio pasado.
«Hace años decimos que podremos terminar con el sida si terminamos con la discriminación y la pobreza. Desde ayer, las personas con VIH en situación de pobreza en Argentina pueden tramitar una pensión para satisfacer necesidades básicas ($52.000)», aseguró Matías Muñoz, fundador de la organización Ciclo Positivo, mediante un mensaje en su cuenta de Twitter.
La pensión podrá ser solicitada en la Unidad de Atención Integral (UDAI) de Anses más cercana, con DNI y sin turno, anunciando que se desea tramitar pensión no contributiva de la Ley 27.675.
Y continuó: «Fue gracias a una Ley, la 27.675, sancionada en 2022, que incorporó este enfoque social y de derechos humanos a la respuesta al VIH. Falta un montón. Pero ahora tenemos la herramienta legal para tapar los baches. Podemos terminar con el sida».