La Justicia finalmente fijó para el año próximo las fechas para el juicio oral por el homicidio de Marianela Rago Zapata, la estudiante de periodismo que en 2010 fue hallada degollada y con 23 puñaladas en el barrio porteño de Balvanera, y por el que su ex novio, el fueguino Francisco Amador, estará sentado en el banquillo de los acusados cómo único imputado.
Amador, un técnico informático también oriundo de Tierra del Fuego pero que vivía en CABA, hoy de 35 años de edad, llegará a juicio en libertad y acusado de «homicidio simple» -con pena de 8 a 25 años de prisión- ya que la figura del «femicidio» recién se incorporó al Código Penal a partir de 2013.
En base a prueba indiciaria y antecedentes de violencia y maltrato que hubo en la pareja, el fiscal Abraldes y la familia Rago intentarán llegar a una condena y defender en el juicio la convicción que siempre tuvo la fiscal de instrucción Marcela Sánchez respecto de que Amador fue el asesino.
En su indagatoria, Amador reconoció que pese a haber terminado la relación, el 24 de junio pasó la noche junto a Marianela en el departamento 7mo. “A” de la calle Tucumán 2080, ya que se seguían frecuentando, pero que la madrugada del 27 había salido con otra chica, coartada ratificada por testigos y que le permitió conseguir el estado de libertad. La Sala VI indicó que el propio Amador reconoció que antes de romper su relación amorosa tenían discusiones fuertes, sobre todo en el último mes, y que en su último encuentro con la víctima, tres días antes del crimen, Marianela le contó que salía con otra persona.
La estudiante fue encontrada por su hermano, con el cuerpo extendido en el piso del living. Según la autopsia murió degollada y quien la asesinó le aplicó además 23 puñaladas con una cuchilla que desapareció del cajón de la cocina de la casa.
Es de destacar que la acusación estará a cargo del fiscal general Sandro Abraldes, uno de los que en 2015 logró la prisión perpetua del portero Jorge Mangeri por el femicidio de Ángeles Rawson.
Obstáculo
Una de las razones de la dilación para empezar el debate, que está elevado a juicio desde el año 2018, es que – increíblemente – aún no culminó la etapa de instrucción suplementaria, con la realización de una serie de medidas que pidieron tanto la Fiscalía como la parte querellante. Uno de esos puntos es un último intento de conseguir en Estados Unidos que la empresa Facebook revele el contenido de las comunicaciones que hayan habido entre Marianela y Amador, en los días previos al crimen. Hasta la fecha en Argentina esto no se pudo conseguir debido a las estrictas políticas de resguardo a la intimidad que esgrimen las empresas norteamericanas.
