El juez interino Andrés Leonelli resolvió ayer el procesamiento de uno de los hermanos Calderón por el homicidio de Sergio Quiróz, cometido el pasado 18 de junio fuera del edificio de estos en calle Goytisolo del barrio de Chacra II.
En aquella oportunidad Quiróz se dirigió al departamento de estos sujetos a ofrecer una campera que había robado la noche anterior, acompañado de otro individuo de frondoso prontuario de 17 años.
Este fue el testimonio clave que permitió determinar que la discusión se dio entre Quiróz y Roberto Calderón, quien lo echó del lugar, ingresando a su departamento para sacar un arma de fuego, mientras ambos “visitantes” buscaron escapar.
Quiróz no fue tan rápido como el testigo, quien dijo que en su carrera alcanzó a escuchar el disparo y ver caer a la víctima.
Este y otros elementos llevaron al doctor Leonelli a dictar el procesamiento con prisión preventiva para Roberto Calderón por el delito de homicidio simple, agravado por el uso de arma de fuego. Calderón continuará encerrado por “riesgo procesal” ya que se mantuvo prófugo unas horas después del hecho.
Finalmente el juez dictó la falta de mérito, a su hermano, Gerardo Antonio Calderón, quien sigue vinculado a la causa pero sin elementos aún que lo vinculen al homicidio. Precisamente este imputado ayer amplió indagatoria sin aportar mucho más a la causa, siendo excarcelado tras el decisorio del juez de instrucción.
