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Nuevo aniversario del hundimiento del Crucero General Belgrano

Al cumplirse 33 años del hundimiento ARA General Belgrano por parte de un submarino británico en la Guerra de Malvinas, el intendente Federico Sciurano participó del acto en homenaje a los 323 tripulantes fallecidos en el hundimiento.

Del acto, que tuvo lugar este sábado 2 de mayo en la Plaza Malvinas, participaron veteranos de guerra, entre ellos sobrevivientes del hundimiento del Crucero; y familiares de caídos en Malvinas.

Además estuvieron presentes la gobernadora Fabiana Ríos; autoridades del Superior Tribunal de Justicia; del Area Naval Austral, del Poder Legislativo; de las Fuerzas Armadas y el presidente del Concejo Deliberante, Damián De Marco. 

Para dar inicio al acto los presentes entonaron las estrofas del Himno Nacional, posteriormente se realizó un minuto de silencio en conmemoración a los caídos. También las autoridades  colocaron una ofrenda floral.

Tras eso, en representación de la Asociación Amigos del Crucero ARA General Belgrano, el veterano Ricardo Verón, se dirigió a los presentes y manifestó que “todos aquellos que pretendan encontrar definiciones conceptuales o racionales para explicar las acciones de la guerra, buscarán en vano”.

En ese sentido reflexionó que “hay que aceptar que el comportamiento humano en esas circunstancias se hacen indescifrable”.

“Vivimos con  intensidad antes de la guerra  en nuestro querido crucero” contó Verón. Al mismo tiempo dijo que  “con todo orgullo y emoción fue mi primer destino naval”.

Agregó que “embarcados allí, transformamos nuestro espíritu en espíritu de combate, que hoy todavía tenemos”.

Continuando con sus palabras Ricardo Verón, recordó que  “la política inglesa buscó terminar las negociaciones ante el riesgo de tener que aceptar las presiones diplomáticas para establecer en Malvinas un gobierno tripartito, Argentina, Naciones Unidas y Reino Unido. Aceptar tres banderas hubiera sido una afrenta para el león ingles”.

Añadió que “por otra parte el gobierno británico respaldaba una intervención armada para recuperar las islas. Estas premisas de ese gobierno se conjugaron para ordenar el hundimiento del Crucero General Belgrano”.

Eso “nos embargó un profundo sentimiento de desánimo, impotencia y tristeza por nuestros camaradas caídos”.

“Su escudo de armas tenía y tiene, la figura mitológica del Ave Fénix, aquel que resurgía de las cenizas” dijo haciendo referencia al crucero Belgrano.

Remarcó que “desde aquella vez que nuestra querida Ushuaia  lo vio partir, nos hemos convertido en verdaderos creyentes de la mitología del Ave Fénix, pero la realidad es otra, cuando comprendimos que el ave solo  resurgiría en nuestros recuerdos”.

“La patria estará en deuda con todos ellos hasta que otra nave con su espíritu marinero surque las aguas del atlántico sur” finalizó Verón.

Al culminar las palabras de Verón, el veterano de Guerra de Malvinas, sobreviviente al hundimiento del Crucero Belgrano, Omar Cabanillas, hizo lo propio,  manifestando que   “estamos aquí para reflexionar en cuanto a lo acontecido aquel día, sobre el accionar mis compañeros y  mío”.

“En esa  reflexión siempre se encuentran mis camaradas caídos en el cumplimiento del deber” remarcó Cabanillas.

El veterano, destacó que en ese momento “no importaron las cosas materiales, había algo que se sentía en el alma, que llamaba fuertemente en el pecho y en el corazón. Se nos llamaba a defender la patria, que no es, ni fue poca cosa”.

“Recuerdo aquella tarde luego de impactos como una serie de acontecimientos a bordo del cual estábamos inmersos, y que desde nuestros puestos de combates realizamos acciones de socorro para los compañeros heridos  y veíamos la posibilidad de mantener el buque a flote” evocó Cabanillas.

Añadió que “nos disponíamos para el abandono, ya que lento y progresivamente se hundía el crucero para que todos nos pudiéramos salvar”.

Indicó que “el juramento que hicimos determina que no fue ni será en vano la muerte de mis compañero, porque tanto ayer como hoy, está en juego nuestro país, nuestra bandera, nuestra historia, y nuestro inmenso honor de ser argentinos”.

Por su parte, el intendente Sciurano, consideró que “hoy es un día muy sensible para todo el país, para la provincia y especialmente para Ushuaia, teniendo en cuenta que fue el último puerto que el crucero tocó antes de partir”.

“Ushuaia fue la ciudad que recibió a los náufragos, eso nos marcó por lo que tenemos la necesidad de transmitir nuestro sentimiento de agradecimiento a los veteranos” dijo el Jefe Comunal.

Para concluir, indicó que “debemos reflexionar y valorar lo que han hecho nuestros héroes por nuestro país”.

En la oportunidad, los veteranos de guerra, Guillermo Arbini y Alberto Andersen, entregaron un presente a los veteranos de guerra sobrevivientes del hundimiento e integrantes del Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas.

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